Quien tiene un porqué para vivir puede enfrentarse a todos los cómos.
Sin música la vida sería un error.
Los monos son demasiado buenos para que el hombre pueda descender de ellos
La verdad es que amamos la vida, no porque estemos acostumbrados a ella, sino porque estamos acostumbrados al amor.
El hombre, en su orgullo, creó a Dios a su imagen y semejanza.
Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en adelante, ya no podré creer en ti.
La esperanza es el peor de los males, pues prolonga el tormento del hombre.
Dios ha muerto.Ahora tenemos que enterrarlo.
Cuanto más nos elevamos, más pequeños parecemos a quienes no saben volar.
Nadie aprende, nadie aspira, nadie enseña a soportar la soledad.
