Usa de tu saber como de tu reloj, teniéndolo en la faltriquera para saber la hora que es cuando lo necesites o te lo pregunten; pero sin estarlo sacando ni hacerlo sonar, para que sepan que lo tienes, imitando a los serenos que siempre están gritando la hora, y a los centinelas que siempre la están campaneando.
Vale la pena luchar por lo que vale la pena tener.
Valgo más por lo que callo que por lo que digo.
Ve a menudo a casa de tu amigo, pues la maleza oculta el camino transitado.
Vemos y entendemos las cosas tal como somos, no tal como son.
Ves la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio.
Viendo que anda en San Martín, dura hasta el fin.
Vísteme despacio que tengo prisa.
Visualiza eso que quieres, ¡vélo, siéntelo, cree en ello!... Haz un plano mental y empieza a construirlo... ten fe en ti mismo... ¡Cualquier cosa es posible!
Vive cada acto de la vida plenamente, como si fuera el último.
