No hay más alianzas que las que trazan los intereses ni nunca las habrá.
Llega el momento de la publicidad, disfrutad del cine si podéis. Si no, también tenéis la música, la literatura o incluso la historia, a no ser que queráis ser presidente del Gobierno.
Es propio de hombres de cabezas medianas embestir contra todo aquello que no les cabe en la cabeza.