Exageráis la hipocresía de los hombres. La mayoría piensa demasiado poco para permitirse el lujo de poder pensar doble.
La primera tarea de la educación es agitar la vida, pero dejándola libre para que se desarrolle.
El movimiento ayuda al desarrollo psíquico y este desarrollo se expresa a su vez con un movimiento y una acción.
Podemos decir que la mano ha seguido a la inteligencia, a la espiritualidad y al sentimiento y que la huella de su trabajo ha transmitido las pruebas de la presencia del hombre.
La mayor señal del éxito de un profesor es poder decir: "Ahora los niños trabajan como si yo no existiera".